Cónyuges indocumentados de ciudadanos estadounidenses, que actualmente gestionan el perdón I-601A para salir del país y completar el trámite consular, ahora podrían calificar para el nuevo programa ‘Parole in Place’. Este programa, que entra en vigor el lunes 19 de agosto, permitiría a estas personas ajustar su estatus migratorio sin verse afectados por la Ley del Castigo.
La Asociación Americana de Abogados de Inmigración (AILA) informó a sus miembros, que incluyen a 17,000 abogados, jueces y profesores universitarios a nivel nacional, que el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) envió el 15 de agosto alertas por mensaje de texto o correo electrónico a algunas personas con solicitudes I-601A pendientes. El mensaje les notificaba sobre la posibilidad de calificar para la libertad condicional en Estados Unidos bajo el nuevo programa, diseñado para mantener unidas a las familias.
Sin embargo, AILA aclaró que estos anuncios son meramente informativos y que no todas las personas elegibles recibirán estas notificaciones. La falta de comunicación no debe interpretarse como un indicador de la elegibilidad o probabilidad de aprobación para la libertad condicional.
Los abogados que representan a inmigrantes con casos pendientes ante la Oficina de Ciudadanía y Servicios de Inmigración (USCIS) pueden acceder a las cuentas personalizadas de sus clientes para monitorear el progreso de sus procesos. Esta nueva opción podría ofrecer un alivio significativo a las familias afectadas por la Ley del Castigo, una ley aprobada en 1996 que impone sanciones severas a inmigrantes indocumentados que han acumulado períodos significativos de presencia ilegal en Estados Unidos.
El USCIS ha comunicado que comenzará a aceptar solicitudes para el programa ‘Parole in Place’ a partir del lunes 19 de agosto, y que próximamente se publicará un Aviso en el Registro Federal para explicar el proceso de solicitud y proporcionar detalles adicionales sobre los requisitos necesarios para ser considerado.
El perdón I-601A, vigente desde julio de 2016, ha permitido a ciertos extranjeros indocumentados completar su trámite consular sin ser sancionados bajo la Ley del Castigo, permitiéndoles obtener una visa de inmigrante y regresar a Estados Unidos. Con la implementación del programa ‘Parole in Place’, se estima que unos 500,000 cónyuges indocumentados de ciudadanos estadounidenses y aproximadamente 50,000 hijastros indocumentados podrán ajustar su estatus sin tener que abandonar el país.
