El obispo de la diócesis católica de El Paso, Mark Seitz dijo que las iglesias de su jurisdicción permanecerán cerradas a pesar de la orden ejecutiva del gobernador de Texas, Greg Abbott, de reabrir el estado en fases. Dicha orden entra en vigor este próximo viernes.
“Nuestros expertos médicos y nuestros líderes locales nos dicen El Paso todavía presenta contagios comunitario y que estos empezaron más tarde que en otras partes del país. Por el momento, reabrir las iglesias no es lo más conveniente,” dijo el obispo.
Además, según el prelado, existen otras preocupaciones al reabrir el culto en las iglesias: la escasez de desinfectantes que haría el proceso de limpieza muy difícil.
“Como iglesia debemos poner el ejemplo y no dar un falso sentido de seguridad ya que gran parte de los fieles son personas en categorías vulnerables a la infección,” señaló Seitz. “Por estas razones, nuestras iglesias no abrir por el momento”.
Las misas se celebraran todos los días con solo las personas necesarias para llevar a cabo la celebración eucarística y están siendo transmitidas por internet.
“Los sacerdotes todavía están disponibles para brindar, por cita, el sacramento de la reconciliación,” expresó el obispo. “Así mismo podrán dar los santos oleos a las personas moribundas y ya se trabaja con los hospitales para llevar a cabo esto de una forma segura”.
En su comunicado el Obispo espero que en unas semanas la prevalencia del virus en nuestra comunidad baje para que le permita abrir las Iglesias, al menos, para congregaciones pequeñas y visitas privadas.
